A 16 años del secuestro de Marita Verón, seguimos acompañando a su familia en el reclamo por verdad y justicia. Marita no se fue: se la llevaron para ser sometida al delito aberrante de la trata de personas, que no sería posible sin la participación de algunos sectores del Estado y privados.
Particularmente, el Poder Judicial debe dejar de ser una cueva clasista y patriarcal para aceptar que todos los días en nuestro país son secuestradas o captadas personas con fines de explotación sexual y/o laboral.
Desde el comienzo, vimos a Susana Trimarco recurrir a todos los espacios posibles para encontrar a su hija. Luego, cuando empezó a crecer, la vimos también a Micaela, hija de Marita. A las dos las abrazamos en esta fecha especial, al igual que todos los días, porque sabemos lo que es la angustia de buscar a un familiar.
Exigimos: a la prensa dominante, que pare de criminalizar a las víctimas y que difunda información responsable; al Poder Judicial, que juzgue y condene a todos, absolutamente todos los culpables de lo que hicieron con Marita; al Poder Ejecutivo, que cese en el retroceso de políticas de Estado de rescate y acompañamiento de víctimas, como también de prevención del delito de trata de personas.
Vamos a seguir acompañando siempre a su familia, repudiando las amenazas y ataques.
H.I.J.O.S. Capital
